Primero visitamos un parque que sería la delicia de cualquier niño
Wombat de 30 kilos más o menos lo mismo que debe pesar Aleix
Koala
Un canguro : le salen de la bolsa las patas de su cría
Lo siguiente fue la comida en un pueblo llamado Cervantes
Y después el desierto de los Pináculos
A ver si lográis ver un emú entre los pináculos
Una de las bonitas dunas de arena blanca que se podían ver en nuestro viaje de vuelta
La puesta de sol
Y como si nos encontráramos dentro de una imagen de cuento
Disfrutamos mucho subiendo por las dunas de una arena blanquísima y viendo como la noche venía
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